Townshend no se negaría una ocasión para crear su propio momento icónico de guitarra-destrucción. Sin embargo, ¡maldigan a Hendrix! cuando el manifestante Abbie Hoffman, (militante de protesta anti-Vietnam) irrumpió en el escenario durante la performance de los Who en Woodstock, Townshend lo consiguió. Hoffman -quién intentó una vez "levitar" el Pentagono a través de la meditación- requisó el micrófono durante "Billar automático Wizard" para protestar por el encarcelamiento del líder de los Black Panters, John Sinclair. Eso no le sentó bien a Townshend, que mandó a Hoffman al carajo, antes de golpearlo con su guitarra, arrojándolo del escenario. La guitarra fue destruida y Townshend tuvo su momento -sin embargo eso poca consolación a Hoffman, que probablemente no apreció convertirse en una nota al pie de página en la historia del rock' de manera tan dolorosa.
(traducción del blog)
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